El ministro de Seguridad, Alejandro Granados, desarrolló una intensa jornada de trabajo en las localidades de Mercedes, Salto y Rojas, donde, entre otras cosas, ponderó la "descentralización histórica" de la seguridad en la Provincia de Buenos Aires desde 2007 en adelante y, particularmente, en los dos últimos años.
"Vamos recorriendo todo el interior de la provincia para que los 135 municipios cuenten con su propia Policía Local o Comunal, Comisaría de la Mujer y la Familia, DDI, DDA, CPC y CPR", agregó el funcionario de Daniel Scioli, que estaba acompañado por el jefe de la Policía Bonaerense, Hugo Matzkin, y parte de su propio Gabinete.
Así las cosas, en Mercedes, el titular de la cartera puso en marcha las sedes de la Comisaría de la Mujer y de la Familia, el Comando de Prevención Rural y la Dirección Distrital de Investigaciones, en una jornada junto a nada menos que Carlos Selva, el Intendente massista de la comuna que en este caso, como ya hizo en otras ocasiones, comparte un evento con personalidades del universo sciolista -cuando no el propio Daniel Scioli-.
Mientras que en Salto y Rojas, Granados inauguró también la Comisaría de la Mujer y de la Familia, la Dirección Distrital de Investigaciones y la Dirección Distrital Antinarcóticos, nuevamente junto a los respectivos jefes comunales, Oscar Brasca y Martín Caso. "Destaco los resultados contundentes en la lucha contra la inseguridad que están arrojando los Comandos de Prevención Comunitaria en el Conurbano y los CPR en el interior", comentó el ministro.
"Estamos enfrentando este flagelo con más prevención y más policías", remarcó.
Siempre en ese mismo marco, el hombre fuerte del equipo bonaerense entregó móviles policiales a dichos municipios que serán destinados luego a la Policía Comunal y el Comando de Prevención Rural, durante una ceremonia en la cual participó el diputado provincial del Frente para la Victoria y alineado con La Cámpora, Alberto España.
Es importante mencionar que en el actual escenario, con el horizonte electoral a cuestas y una campaña que arrancará en pocos meses, la cuestión de la seguridad es de máxima importante dentro del sciolismo y más, ciertamente, a partir de las medidas que impulsa su cartera hace pocos más un año y medio. Especialmente, entre ellas, la polémica Policía Comunal, resistida por algunos alcaldes pero instalada en la agenda sin demasiados matices.
Cabe recordar que la Policía Municipal surgió, en 2014, como un proyecto del Poder Ejecutivo y que auspiciaba el propio Granados. Fue presentado en el primero semestre de año pero su tratamiento quedó a la deriva por una serie de resistencias: la más importante corría por cuenta del Frente Renovador en el Senado -donde tenía el suficiente poder como para frustrar su tratamiento- y también había diferencias con el propio oficialismo en la Cámara de Diputados.
Scioli, entonces, sacó la fuerza a través de un decreto de su autoría y posterior resolución del Ministerio de Seguridad, que intervenía tras el laberinto legislativo en que había entrado la iniciativa.
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